viernes, 22 de marzo de 2019

LA IMPORTANCIA DE UNA BUENA FORMA FISICA PARA MONTAR EN MOTO

Montar en moto a nivel usuario ya es casi un deporte, y más todavía si acometemos largas distancias en una o varias jornadas consecutivas. Hacerlo en circuito, ya sea como aficionado, como piloto amateur o como profesional, es un deporte de pleno derecho. Muy exigente físicamente, conviene estar bien preparado si no queremos que afloren las lesiones, tanto por el esfuerzo físico, como por las posturas mantenidas durante largos periodos de tiempo, o por la fuerza que ejerce el viento sobre nuestro cuerpo. También, lógicamente, por los riesgos de hacerse daño en caso de caída.

Así las cosas, ¿Cuántas veces has invertido cinco o diez minutos para calentar y estirar los músculos antes de salir de viaje con la moto, o realizar unas tandas en circuito?Probablemente la respuesta por parte de la mayoría sea nunca. Creer que como vamos sentados y relajados no nos hace falta es totalmente erróneo. Pero tranquilos que no somos los únicos, en deportes extendidos como la natación o la bicicleta, ocurre lo mismo. En el caso que nos ocupa, no hace falta un protocolo elaborado ni una sesión intensiva de calentamientos y estiramientos. Bastan unos minutos antes de salir y luego en cada parada que hagamos en el viaje o las sesiones en circuito.


Con unos sencillos ejercicios es posible evitar que aparezcan dolores musculares, producto de movimientos y posturas nada naturales que poco a poco van acumulando cansancio y estrés en nuestros músculos y articulaciones, hasta que un buen día llega el dolor que anuncia una lesión. Dichos ejercicios han de ir dirigidos especialmente a la columna vertebral a todos los niveles (cervical, dorsal y lumbar), los trapecios y hombros, antebrazos, y las piernas. Extensiones y rotación del cuello, y de los diferentes músculos del cuerpo, es fundamental. Con ellos liberaremos stress, y alejaremos lesiones tan habituales como el síndrome compartimental, síndrome de túnel carpiano, epicondinitis, cervicalgia o lumbalgia. O contracturas y molestias musculares que no hemos sabido prevenir durante el día cuando aparecían los primeros síntomas.



Si llevas la práctica del motociclismo un pasito más allá, la importancia de un buen estado de forma ya es fundamental. Sobre la moto de campo o carretera en conducción deportiva el ejercicio es constante, y el nivel de esfuerzo muy elevado. Es por ello que sea conveniente reforzarnos con deportes complementarios cardiovasculares y de fuerza, como el levantamiento ligero de pesas, la natación, bicicleta, etc. Pensemos que en una sesión intensiva en circuito nuestro corazón puede estar latiendo entre 160 y 180 pulsaciones por minuto, unas cifras que requieren no ya de un calentamiento antes de la práctica deportiva, sino de un entrenamiento previo para evitar fatiga o en casos extremos un desvanecimiento. Y es que no olvidemos que estamos «sujetando» en fuertes frenadas, aceleraciones y cambios de dirección, un vehículo que ronda casi los 200 kg de peso. Como para no estar un poco en forma si no queremos quedar exhaustos en unos pocos metros. De hecho, por todos es sabido que los pilotos de élite son verdaderos atletas, y como tales se entrenan, incluso coqueteando con disciplinas tan exigentes como el triatlón, por poner un ejemplo.

Sea como fuere, rodando en moto por carretera o disfrutando de nuestra montura en circuito, difícilmente llegaremos a sus niveles de esfuerzo, pero siempre es conveniente calentar bien y estirar para huir de algunas lesiones. A modo informativo, estas son algunas de las más habituales, y que conviene prevenir para disfrutar al máximo de nuestra moto y este deporte.

Síndrome compartimental 

Suele producirse en pilotos de motos deportivas cuya postura, y por la acción de la frenada, descargan gran cantidad del peso en los brazos. La musculatura del antebrazo aumenta de forma que pinza los nervios y vasos sanguíneos, los síntomas comienzan con un hormigueo y dolor, pero puede llegar a dormirse la mano y a producirse necrosis. No hay tratamiento preventivo, sino más bien, celeridad en el diagnóstico para evitar la cirugía y poder tratarlo solo con rehabilitación y electroterapia.

Problemas en la articulación temporomandibular (ATM) 
Como contracturas, subluxaciones, luxaciones o incluso bloqueos producidos por apretar mucho los dientes de forma mantenida por la tensión. Los médicos suelen recomendar el uso de una férula de descarga para evitar el desgaste de las piezas dentales por efecto de la fricción y la presión de la musculatura de la mandíbula.

Sobrecarga en trapecios
Se produce por conducir de forma tensa, o bien con los brazos muy elevados y estirados (postura típica de las motos custom).

Sobrecarga del tibial anterior
En uso intensivo de la moto en ciudad o carreteras de curvas, el movimiento que hacemos con el pie izquierdo en la palanca del cambio de marchas puede llegar a provocarnos sobrecarga del músculo tibial anterior. Como en el caso anterior se previene los debidos estiramientos musculares y se trata con fisioterapia o electroterapia.

Ciatalgia
Es un dolor muy intenso en el recorrido del nervio ciático y que viene provocado por una mala postura en la moto con una lesión previa de la columna lumbar tipo pinzamiento, hernia, profusión... El tratamiento más indicado es la fisioterapia y electroterapia. Cuando se produce la hernia con pérdida de tejido de un disco, normalmente se interviene quirúrgicamente.

Síndrome del túnel carpiano
Una postura incorrecta de la muñeca de forma repetida o prolongada que termina pinzando el nervio mediano que va del antebrazo a la mano. Generalmente no se producen solo por montar en moto, sino por la acumulación de estrés producida por el ratón y el teclado del ordenador, tocar algún instrumento musical, coser o hacer trabajos manuales... Se puede prevenir con ejercicios de extensión y compresión de los dedos y haciendo descansos en la actividad que los puede ocasionar. Se aconseja poner una férula rígida que corrija la posición de la muñeca para liberar presión sobre el nervio. En casos avanzados hay que recurrir a la cirugía.

Dolor de espalda
Los más comunes son lumbalgia, dorsalgia o cervicalgia, según la zona de focalización del dolor. La lumbalgia y la dorsalgia suelen producirse cuando forzamos la postura para evitar la oposición del viento, inclinándonos sobre el depósito y como consecuencia de baches repetitivos, que van cargando la espalda. La cervicalgia está asociada a la tensión del cuello, sometido a turbulencias y una altura del manillar (por exceso o por defecto) poco ergonómica. Pueden prevenirse con sencillos ejercicios de estiramiento y la colocación de una faja y, una vez se producen, se tratan con fisioterapia, electroterapia, etc. Si el dolor es en el trasero, a la altura del coxis, es recomendable utilizar asientos de gel.


Fuentes: motociclismo.es/Oscar Pena120416